Todo proceso nace con ilusión. Pincha el enlace para visualizar un resumen del proceso.
La certeza de llegar a algún lugar o a poseer una habilidad o conocimiento, que proponen los objetivos, toma forma en la actividad diaria.
Todo comienza con el convencimiento, no con pocas dudas de lo que se necesita y quiere. Asumir que iniciar un proceso es avanzar en la construcción de un porvenir. Y que en el resultado, a pesar de no tener garantía, cada persona ejerce su capacidad para decidir. Esto implica agarra la posibilidad con voluntad y tesón.
Este andar no es fácil, el esfuerzo se pone a prueba y las dudas revolotean sobre la necesidad y la urgencia. De esto saben las veintiocho personas que asumieron la oferta del curso corto de limpieza de cristales. La respuesta positiva que las personas han tenido, es el indicador de una actitud responsable y recíproca ante una propuesta que creemos, como Servicio, que puede ser interesante. A todas y cada una de ellas, nuestra sincera felicitación.
Recordamos y saludamos, también, a la docente Rosana Fernández, su profesionalismo y calidez han sido características esenciales para que las tres ediciones de este curso alcanzarán los objetivos y se desarrollarán en un ambiente ameno y positivo.
Esta formación contó con el apoyo de distintas entidades que con generosidad pusieron a la disposición del alumnado fachadas e interiores para realizar las prácticas. Acogieron con agrado a las personas y les motivaron en su formación.
Uno de los objetivos que nos hemos propuesto en el Servicio de Orientación en poner en contacto a las personas con las empresas del sector, que podrían ser las futuras empleadoras. Por lo que para cerrar este proceso formativo, no podía faltar la invitación a las empresas. Agradecemos a aquellas que acudieron, su presencia es importante por la proyección laboral que representan.